David Fernández de Arriba muestra cómo el cómic puede ayudar a transmitir la memoria histórica

En el marco de la COLOR Week, este viernes ha tenido lugar la charla en línea Memoria y viñetas. El cómic como herramienta de memoria, a cargo de David Fernández de Arriba, profesor de ciencias sociales, y de Enric Garriga, presidente de la Amical Mauthausen. Fernández de Arriba es coordinador del libro Memoria y viñetas. La memoria histórica en el aula a través del cómic, que analiza el período comprendido entre la Segunda República y la Transición española a partir de algunas de las novelas gráficas más relevantes de los últimos años.

La obra es fruto del trabajo conjunto de David Fernández de Arriba, Gerardo Vilches, Pepe Gálvez y Elena Masarach. En ella se habla de las singularidades del lenguaje del cómic, se repasa la historia del género y se lo relaciona con la recuperación y conservación de la memoria histórica. Además, se incluyen entrevistas a autores y propuestas didácticas para trabajar en las aulas en relación a trece novelas gráficas sobre el periodo 1931-1982, entre las que figuran El arte de volar y El ala rota de Antonio Altarriba, Jamás tendré 20 años de Jaime Martín, Los surcos del azar de Paco Roca o Paracuellos de Carlos Giménez.

Según ha explicado Fernández de Arriba, a pesar de los prejuicios que ha arrastrado tradicionalmente el cómic, este es un género con muchas virtudes para transmitir conocimiento y, en concreto, para abordar la memoria histórica. Por un lado, es poseedor de un lenguaje propio muy intuitivo: "Tiene texto pero también imagen. Si ambas cosas tienen mucha fuerza, es más fácil llegar al alumnado. Además, la forma de leerlo es muy natural". Relacionado con ello, también ha destacado el ritmo de lectura, que permite a la personas detenerse el tiempo que quieran en una sola viñeta y, en cambio, avanzar con rapidez ante determinadas escenas de acción.

Sobre la rigurosidad de este tipo de obras, el profesor ha asegurado que muchas de ellas siguen procesos de documentación muy cuidadosos y que, gracias a ello, son absolutamente fieles a los hechos reales. Además, representan una mirada honesta y cercana sobre la historia, ya que a menudo sus autores tienen una implicación personal: "Sus protagonistas son personas normales a los que la historia les pasó por encima. La identificación con los personajes de los cómics es más fuerte".

Fernández de Arriba también ha señalado como una cualidad de los cómics su enorme diversidad tanto en lo que se refiere a temas como a formatos, tipos de historias y estilos.

El autor ha celebrado durante su intervención que cada vez haya más personas estudiando el género y su relación con la historia.

Una herramienta más para hacer memoria

Enric Garriga, presidente de Amical Mauthausen y otros campos, firma uno de los prólogos del libro Memoria y viñetas. La memoria histórica en el aula a través del cómic. Durante su intervención en la conferencia, el activista ha recordado la labor de protección y recuperación de la memoria de la deportación y de prevención del fascismo que realiza su entidad. Un trabajo que, a través de la Xarxa Mai Més, se hace extensivo a ayuntamientos como el de Rubí, centros educativos y otras asociaciones. "Para hacer este trabajo, se necesitan herramientas. Este libro es una de excelente. Si queremos luchar contra el fascismo y construir un mundo más solidario, más justo y más sostenible hacen falta básicamente dos cosas: educación y memoria. Educación para transmitir valores y memoria para recordar el pasado para que no se vuelva a repetir y para rendir homenaje a aquellos hombres y mujeres que se sacrificaron por la libertad".

El concejal de Memoria Historia, Pau Navarro Cano, ha sido el encargado de presentar la conferencia de este viernes, que ha vinculado a las últimas acciones realizadas en Rubí para hacer justicia a la memoria de las personas deportadas. El edil ha coincidido con los ponentes a la hora de señalar el cómic como una herramienta efectiva para hacer llegar la historia a los más jóvenes: "Tenemos que hacer un trabajo muy riguroso pero también atractivo para educar y sensibilizar en derechos humanos, para tener generaciones futuras con actitud crítica y que sepan diferenciar aquellos fascismos escondidos detrás de cosas fáciles, de regalos, pero que en realidad lo que traen es injusticia".

Las actividades de divulgación enmarcadas en la COLOR Week seguirán durante el fin de semana. Este sábado, tendrá lugar la charla El color y la fotografía, con Carles Mercader y Enric Montes; y el domingo, Las emociones y su color, a cargo de María Palacín y Elena Sorribes.