El Ayuntamiento continúa la sustitución de contenedores por nuevos modelos accesibles
Tras los 130 que se cambiaron hace un par de meses, ahora se renuevan otros 300 de la fracción orgánica en diferentes puntos de la ciudad
El Ayuntamiento ha iniciado la renovación de 300 contenedores de la fracción orgánica por nuevos modelos accesibles para personas con movilidad reducida y otros colectivos, que reemplazarán a contenedores antiguos. La implantación se realizará de forma progresiva entre los meses de marzo y abril. A finales del pasado año, el Consistorio ya inició el proceso de sustitución con la puesta en funcionamiento de 130 nuevos recipientes para lanzar la basura, en aquella ocasión de las diferentes fracciones.
Los nuevos contenedores de la orgánica tienen mayor capacidad (los antiguos eran de 400 litros, mientras que el nuevo modelo es de 2.000 litros). Cuando se instalaron las primeras unidades, este aumento de la capacidad generó cierta confusión entre la ciudadanía, que durante estos dos meses de funcionamiento de los nuevos recipientes ha vertido a la orgánica residuos que debían tirarse en otros contenedores.
Por este motivo, el Ayuntamiento ha preparado una pequeña campaña informativa para recordar a las personas usuarias qué tipo de basura se puede depositar en la orgánica. Así, se colocarán carteles en las fachadas explicando, de forma gráfica, el cambio de modelo de contenedor y recordando qué residuos deben tirarse. Las agentes por el civismo también realizarán tareas de concienciación sobre el uso de estos nuevos contenedores.
En el caso de las baterías ubicadas en Can Ximelis, Els Avets, Can Vallhonrat, Can Serrafossà y La Perla, en vez de carteles en las fachadas, se utilizarán los mismos contenedores antiguos para anunciar este cambio. Los recipientes en desuso quedarán bloqueados e inutilizados y se enganchará un vinilo informando de que el contenedor ya no está en servicio y que a partir de ahora se deben lanzar los residuos orgánicos al nuevo contenedor.
La elección de los nuevos modelos se ha hecho de forma consensuada con la asociación Rubí tiene ruedas, que había manifestado en el Consistorio la necesidad de que los contenedores tengan unas características determinadas para poder ser utilizados más fácilmente por estas personas.
Margen de mejora
La orgánica supone el 32% del total de residuos que generamos en Rubí. En este sentido, esta fracción todavía tiene mucho margen de mejora para poder conseguir resultados óptimos en la recogida selectiva. Y es que en una bolsa tipo de la fracción resto hay un 68% de residuos que es materia orgánica y que, al mezclarse con el resto, va a parar al vertedero, con un coste económico de 841.456 ,72 euros al año.
Aparte del volumen que se recoge, también es necesario que la fracción sea lo más pura posible, es decir, que no haya impropios mezclados con los restos orgánicos, como pueden ser plásticos. De hecho, la Ordenanza reguladora de la prevención y la gestión de los residuos municipales dispone que la ciudadanía debe depositar la materia orgánica en bolsas compostables dentro del contenedor marrón y que en ningún caso debe realizarse en bolsas de plástico, cajas , paquetes o envoltorios, para evitar malos olores y derrames.