El Ayuntamiento de Rubí promueve la eficiencia energética entre los comercios de la ciudad

El Ayuntamiento de Rubí, a través del proyecto estratégico de fomento de la eficiencia energética y las energías renovables Rubí Brilla, ha organizado una serie de talleres dirigidos a los comercios de la ciudad. El objetivo de esta iniciativa, con la que se pretende que los comerciantes aprendan a controlar y a reducir su consumo energético, es fortalecer el tejido comercial rubinense y fomentar que éste sea más competitivo.

"El proyecto Rubí Brilla intenta promover un cambio en la cultura energética en diversos ámbitos de la ciudad: en la administración local, en las industrias ─la última acción dirigida a este sector fue la organización de la 10ª jornada técnica, el pasado viernes─, en el ámbito doméstico y, en este caso, en el comercial", ha explicado el concejal del Área de Desarrollo Económico Local, Rafael Güeto. El responsable de Comercio ha hablado de la finalidad de estos talleres dirigidos al tejido comercial: "El objetivo final es que los comercios sean conocedores de cuál es su consumo energético y de cuáles son las posibles medidas de ahorro energético que pueden aplicar. Hablamos de medidas que no suponen ningún coste para el comercio y con las que pueden obtener un beneficio directo en la factura eléctrica que, como cualquier actividad económica, es un factor importante dentro de los costes de producción".

Gemma Boltà, propietaria del establecimiento Gemma's Estilistes, que este lunes ha asistido al taller dedicado a las peluquerías, ha hablado de la utilidad de estas sesiones: "Para mí es muy interesante este tema [...]. No sabes qué consumes ni qué potencia tienes que contratar. Y en este taller te hacen entender qué es una factura y, de este modo, puedes ver qué necesita tu negocio".

La eficiencia energética consiste en consumir mejor la energía: reducir el consumo sin disminuir ni la calidad ni las prestaciones recibidas, evitando derroches innecesarios.

Control y reducción del consumo energético
Las sesiones, específicas para diferentes sectores comerciales (peluquerías, hostelería, comercios al por menor, alimentación, panaderías, etc.), son totalmente prácticas y en grupos reducidos de un máximo de 10 comercios por taller. La formación se realiza in situ en un comercio que se presente voluntario ─en este tercer taller, el establecimiento que ha prestado sus instalaciones para llevar a cabo la sesión ha sido la peluquería Je'Iván─. El comercio anfitrión se monitoriza durante una semana y el día del taller se muestra cuál es el consumo energético tipo de aquel sector concreto, se dan claves y herramientas para descubrir cuáles son los aparatos menos eficientes energéticamente del comercio tipo y qué medidas correctoras se pueden llevar a cabo para reducir el consumo energético.

En general, los comercios desconocen que hay muchas medidas que pueden aplicar para reducir su coste eléctrico sin necesidad de invertir un euro. Se trata, por una parte, de reducir el precio de la factura comprando la energía a la comercializadora más económica y ajustando las potencias contratadas; y, por otro, disminuir la cantidad de electricidad que se consume, simplemente con un cambio de hábitos. Los comercios pueden decidir invertir el ahorro que se consigue gracias a estas acciones en otras medidas, como la compra de aparatos más eficientes que les permitan seguir ahorrando.

Güeto ha cuantificado el ahorro que pueden conseguir los negocios que participan en estos talleres: "Los técnicos del proyecto Rubí Brilla calculan que, una vez hecha la auditoría energética que se realiza a los comercios y aplicando las medidas que se proponen, el ahorro se puede situar entre un 20 y un 30% de la factura energética anual, que es un volumen muy importante a tener en cuenta".

Hasta ahora se han organizado un total de tres talleres: el de este lunes, para el sector de las peluquerías; otro dirigido a comercios de bajo consumo energético y un último dirigido al sector de la restauración.