El Ayuntamiento edita un cuento sobre la giganta Lola del Pinar

La Lola es un cuento editado por el Ayuntamiento de Rubí, escrito e ilustrado por las rubinenses Montse Flores i Sònia González (Cuchu), que tiene como protagonista a la giganta Lola, símbolo de la diversidad y la inclusión social en el barrio del Pinar.

La giganta Lola se creó el 2007 como emblema del trabajo comunitario del barrio del Pinar. Se trata de la figura de una mujer con una maleta de madera y un fardo que se definió con los mismos vecinos y vecinas del barrio como homenaje al origen del Pinar: la llegada de personas inmigrantes en los sesenta. “Durante la época de la inmigración son las mujeres las que unen, las que cosen las familias. A veces los hombres llegan primero a trabajar, pero el proceso culmina cuando llegan las mujeres. Por eso el símbolo del Pinar tenía que ser una mujer. Una mujer de los años sesenta con su peinado y su pañuelo de hacer fardos. Una mujer fuerte”, explica la presidenta de la Asociación Vecinal del Pinar, Maria Josep Munuera. La creación de la giganta permitió unir el barrio en torno al proyecto con visitas a talleres de fabricación de gigantes, charlas sobre el mundo geganter, la organización de un grupo de cosedoras para hacer la ropa, un taller de construcción de la giganta, un taller de gralla y caja, la fiesta de bautizo y, finalmente, la constitución oficial de la Colla Gegantera del Pinar.

Ahora, esta experiencia se transforma en un cuento para explicar a las nuevas generaciones quién es la Lola y a través de ella, transmitir la historia del barrio del Pinar y de su gente. Para la escritora y docente de secundaria Montse Flores, el proceso de creación del cuento ha significado conectar con su niñez: “Cuando me explicaron la historia de Lola me quedé sola a mi dormitorio y cogí la maleta de mi padre. La historia de Lola explica que la vida de una persona puede caber dentro de una maleta y yo lo he vivido. Tengo también el pañuelo de hacer fardos de mi abuela. Y cuando mis alumnos recién llegados llegan, muchos tienen toda la vida en una maleta. Todos somos migrantes”.

“La historia de Montse estaba llena de magia. No pude imaginármela de madera. Y la giganta cobró vida y se ha convertido en un personaje de carne y hueso”, dice la artista Sònia González, que ha ilustrado la historia de Lola y su maleta mágica usando los colores de Rubí.

El Ayuntamiento ha editado 500 ejemplares de La Lola que pronto se distribuirán entre los niños y niñas del barrio del Pinar durante la Fiesta de la Primavera, que coincide con el cumpleaños de la giganta.

El cuento se ha presentado este jueves en el Ateneu en el marco de la COLOR Week.