El Ayuntamiento promueve la compra sin residuos entre la ciudadanía y el sector comercial
El objetivo de esta campaña comunicativa es prevenir los residuos asociados a la compra cotidiana, especialmente los plásticos
El Servicio Educativo de Residuos del Ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña comunicativa para reducir los residuos vinculados a la compra doméstica. A través de una serie de elementos gráficos, el Consistorio quiere concienciar tanto a la ciudadanía como a los y las comerciantes de la importancia de utilizar envases retornables y reutilizables con el objetivo de prevenir los residuos plásticos.
El impacto ambiental de los envases ligeros ha ido tomando relevancia durante la última década. Para frenar la contaminación por plásticos, la Unión Europea aprobó en 2019 la directiva sobre plásticos desechables, que obliga a los países miembros a aplicar una serie de medidas contra este material. Así, la venta de pajitas, cubiertos, platos, bastoncillos de algodón y envases de poliestireno para alimentos, entre otros productos de plástico de un solo uso, está prohibida desde el 3 de julio en el conjunto de la Unión Europea. Sin embargo, la medida no entrará en vigor en España hasta el 1 de enero de 2023, como parte de la Ley de residuos y suelos contaminados, que se encuentra pendiente de tramitación. La alternativa a estos productos son artículos similares pero fabricados con papel, cartón o fibras naturales.
También han entrado en vigor en el conjunto de la Unión Europea una serie de obligaciones para compresas, tampones higiénicos y aplicadores de tampones; toallitas húmedas; productos del tabaco con filtros y vasos de bebida. La norma prohíbe la introducción de estos productos en el canal de distribución, pero los y las comerciantes que ya los han adquirido los pueden vender.
En Cataluña, el Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural está trabajando en el desarrollo de dos anteproyectos de ley para minimizar la producción de residuos e impulsar la economía circular.
El primero de los textos se convertirá en la Ley de embalajes de Cataluña, una norma dirigida a la industria para evitar los embalajes excesivos y los envases que, después de un solo uso, se convierten automáticamente en un residuo. La nueva ley estimulará los envases retornables para que el plástico, el aluminio y el vidrio tengan una vida mucho más larga.
El segundo anteproyecto será la futura Ley de residuos, que regulará la gestión pública de la basura. Uno de los retos de esta norma es convertir la fracción orgánica en un activo, en vez de un inconveniente, con una nueva estrategia de aprovechamiento. Esta nueva ley de residuos también incluirá el desarrollo de la directiva europea de plásticos.
"Dentro de un tiempo echaremos la vista atrás y nos pondremos las manos a la cabeza al ver la cantidad de residuos inútiles que generábamos. Es inviable seguir así. A pesar de que queda mucho camino, el cambio está llegando a base de concienciación y nuevas leyes", ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Transición Ecológica y Bienestar Animal, Andrés Medrano Muñoz.
Concienciación sobre la compra sin residuos
Para reforzar la entrada en vigor de la nueva directiva europea, el Ayuntamiento ha reeditado la campaña Compra sin residuos, que se impulsó en noviembre de 2020. En aquella ocasión, se repartió una bolsa de malla en los hogares rubinenses para promover la compra sin residuos.
Los mensajes que se difunden en esta segunda fase de la campaña van en la línea de fomentar el uso de envases retornables y reutilizables, como fiambreras, botellas de vidrio u otros recipientes reutilizables para comprar a granel. La campaña se dirige a las personas consumidoras, que hacen la compra cotidiana en los comercios locales, y también a los establecimientos comerciales de la ciudad con potencial para promover un consumo más responsable y sin residuos.