El Ayuntamiento y Ecovidrio colaboran para fomentar la recogida selectiva de vidrio y prevenir el cáncer de mama
Hasta principios de noviembre, habrá instalados dos contenedores de color rosa en la plaza Catalunya en el marco de la campaña "Recicla vidrio por ellas"
Rubí es una de las más de 170 ciudades españolas que este año se han sumado a la campaña Recicla vidrio por ellas. Se trata de una iniciativa solidaria que impulsa Ecovidrio con la colaboración de la Fundación Sandra Ibarra con el doble objetivo de promover el reciclaje de vidrio y contribuir a la lucha contra el cáncer de mama.
En el marco de esta campaña, que coincide en el tiempo con la conmemoración, este martes, del Día mundial de lucha contra el cáncer de mama, se han instalado dos iglús rosas en la plaza Catalunya. Ecovidrio transformará los envases de vidrio depositados en estos contenedores en una donación a la Fundación Sandra Ibarra de Solidaridad frente al Cáncer.
El cáncer de mama es el tipo de cáncer más frecuente que sufren las mujeres en Cataluña. Cada año se diagnostican aproximadamente 3.400 casos en mujeres de 50 años o más. "Por suerte, un porcentaje muy alto se recupera. La detección precoz es clave y, por ello, cualquier campaña que trabaje y apoye a las mujeres que padecen la enfermedad y a sus familias es muy importante para nosotros", ha comentado la alcaldesa, Ana María Martínez Martínez. "Esperamos que estos dos contenedores se llenen vidrio y que todas las ciudades participantes estemos a la altura, poniendo nuestro granito de arena para poder acompañar a todas estas mujeres, que necesitan que, en esta heroicidad, las tengamos muy presentes y les ayudemos".
Según Silvia Mayo Elias, gerente en Cataluña de Ecovidrio, los dos contenedores rosas se han ubicado en la plaza Catalunya, una ubicación muy concurrida de la ciudad, con el objetivo de que sean "un altavoz de esta campaña, que une dos causas: sensibilizar sobre el cáncer de mama y la importancia de cuidar nuestra salud; y concienciar sobre la necesidad de reciclar el vidrio y cuidar la salud del planeta. Porque la salud del planeta y de las personas están intrínsecamente ligadas".
En este sentido, el concejal de Medio Ambiente, Transición Ecológica y Bienestar Animal, Andrés Medrano Muñoz, ha asegurado que "sólo reciclando vidrio, ya ayudamos a la salud y prevenimos el cáncer". Y es que, como ha explicado el concejal, el vidrio reciclado conlleva una reducción de un 20% de las emisiones y una reducción del consumo de agua de un 40% en relación al vidrio nuevo. Teniendo en cuenta que uno de los principales factores de riesgo del cáncer ─incluido el de mama─ es la contaminación, reciclar vidrio ayuda a prevenir la enfermedad.
En esta quinta edición, la campaña se ha extendido por más de 170 ciudades de todo el Estado español ─una veintena de catalanas─, como Reus, Palamós, Madrid, Sevilla, Valladolid, Murcia, Málaga o Logroño. Así, Ecovidrio ha instalado 500 contenedores rosas por todo el país.
Paralelamente, Agatha Ruiz de la Prada ha diseñado un miniglú especial para la ocasión, como símbolo de la concienciación y solidaridad con el cáncer de mama. Este elemento se podrá adquirir a través de la web miniglú.es y los beneficios se destinarán a la Fundación Sandra Ibarra para contribuir a la prevención e investigación de este tipo de cáncer.
En Rubí, paralelamente a la campaña, este martes se teñirá la fachada del Ayuntamiento de rosa como muestra de solidaridad con aquellas mujeres, y también el porcentaje pequeño de hombres, que sufren o han sufrido la enfermedad.
El reciclaje de vidrio en Rubí
Según los últimos datos relativos al año 2020, los y las rubinenses reciclaron un total de 1.358 toneladas de envases de vidrio, lo que supone que cada habitante recicló de media 17,3 kg.
"El vidrio es un material que se recicla al 100% y hay que depositarlo en el contenedor pertinente", ha insistido Andrés Medrano Muñoz. "Aunque reciclamos unas 1.300 toneladas al año, también estamos derrochando ─tirando en el contenedor del resto─, unas 1.200 toneladas más. Esto conlleva unos 190.000 euros que podríamos destinar a otras actuaciones, pero que pagamos en forma de residuos resto, cuando en realidad es fracción vidrio, que deberíamos recuperar porque se puede reciclar infinitas veces".
Respecto a la tasa de contenerización, Rubí cuenta con una media de 185 habitantes por contenedor, disponiendo de un total de 425 iglús para los residuos de envases de vidrio.