El Club Natació Rubí realizará obras de mejora en la piscina descubierta de Can Rosés durante el mes de agosto
La entidad adaptará la piscina de competición y el solarium para que los bañistas puedan seguir disfrutando de las instalaciones mientras se ejecutan los trabajos
El Club Natació Rubí (CNR) realizará obras de mejora en la piscina descubierta de Can Rosés entre el 1 de agosto y el 6 de septiembre. Los trabajos permitirán acabar de forma definitiva con toda una serie de anomalías que venía sufriendo la instalación, así como realizar varias reformas que repercutirán en un mejor servicio hacia los usuarios.
En estos momentos, la piscina de verano de Can Rosés sufre pérdidas de agua importantes en las tuberías de impulsión. Por otra parte, el hecho de que esté rodeada de capas de aguas freáticas ha provocado movimientos en el vaso que han acabado generando una grieta longitudinal en su interior.
Durante el mes de agosto, el Club Natació Rubí reparará todas estas anomalías y, para evitar que se reproduzcan, impermeabilizará el vaso e instalará un nuevo revestimiento de gresite antideslizante. Además, la entidad aprovechará las obras para introducir diversas mejoras en la instalación: se reformarán los accesos a las escaleras de la piscina, se cambiarán las bombas de filtración de agua por unas más eficientes y se modificará la altura de los jets de impulsión para mejorar la filtración y evitar corrientes de agua molestos para los nadadores.
El concejal de Deportes, Juan López, ha asegurado que esta actuación no se podía retrasar más: "Se ha detectado que la piscina pierde unos 4.000 litros diarios de agua caliente tratada. No podíamos esperar más a realizar estas obras". En cuanto al momento escogido para llevar a cabo los trabajos, López ha explicado que "los meses de junio y julio la afluencia de gente es masiva y, en cambio, en agosto es bastante más reducida. Por ello se ha tomado la decisión de ejecutar las obras en este momento".
Con el objetivo de minimizar las molestias que puedan ocasionar estas obras y garantizar el servicio de piscina de verano durante el mes de agosto, el Club Natació Rubí ha previsto una serie de medidas. Así, la entidad adaptará las dos piscinas cubiertas ─la de competición y la pequeña─ como instalaciones de verano y, en el caso de la mayor, habilitará tanto zonas de baño libre como carriles para los usuarios que quieran nadar. Además, el solarium de la piscina se equipará con tumbonas y se habilitarán zonas de sombra, se ampliará el número de duchas y se creará una zona de picnic con mesas, sillas y máquinas de vending.
El CNR, con unos 6.200 socios, ha optado por ejecutar estas obras en agosto para perjudicar lo menos posible a los usuarios habituales de la instalación. Y es que, durante la temporada normal (septiembre-julio), las piscinas de Can Rosés acogen un gran volumen de actividades programadas: cursos de natación para niños a partir de 2 años y para adultos, cursos para escuelas y otros centros, y entrenamientos y competiciones de los equipos de natación, waterpolo, triatlón y natación sincronizada, aparte de la natación libre que practican los socios. Esto hace que la piscina afectada por las obras reciba durante la temporada una media de 200 visitantes diarios, mientras que en agosto esta cifra baja hasta los 60 por día. De hecho, durante la última semana de agosto ya se aprovechaba tradicionalmente para cerrar la instalación para realizar tareas de limpieza y los habituales controles sanitarios. En este sentido, el gerente del Club Natació Rubí, Francisco Mateo, ha asegurado que "agosto es el único mes en el que podemos afectar a un número más reducido de usuarios".
Las obras de mejora tendrán un coste de 123.050 euros, que asumirá el CNR.