El nuevo programa municipal de empoderamiento de mujeres con diversidad funcional reúne a trece participantes

La alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, y la concejala de Programas Sectoriales, Yolanda Ferrer Polo, han conocido este jueves a las participantes en el nuevo programa municipal para empoderar a las mujeres con diversidad funcional. Trece rubinenses con distintos tipos de discapacidad ─física, intelectual, sensorial o con una patología de salud mental─ se han sumado a esta iniciativa, que busca dotarlas de un espacio de encuentro para compartir sus necesidades, inquietudes y retos.

El programa está impulsado por el Servicio de Diversidad Funcional del Ayuntamiento y las personas referentes en bienestar comunitario de los centros de atención primaria Anton de Borja, Sant Genís y Mútua de Rubí, con la intención de combatir la exclusión y aislamiento que pueden sufrir mujeres con discapacidad en ciertos ámbitos. Esta primera edición arrancó en octubre y durará hasta junio, estructurada en sesiones semanales de dos horas en las que las participantes plantean aquellos temas que más les interesan bajo la coordinación de las profesionales de los CAP.

En el encuentro de este jueves, celebrado en la Escuela Municipal de Música Pere Burés, la alcaldesa y la concejala han escuchado las dudas e inquietudes de este grupo de mujeres con discapacidad, y las motivaciones que las han llevado a implicarse en este proyecto. Para Ana María Martínez Martínez, “es importante dar voz a las ciudadanas con diversidad funcional porque a menudo sufren una doble discriminación: por ser mujeres y por tener una discapacidad. Este programa nos permite acompañarlas, recoger sus necesidades y, al mismo tiempo, detectar posibles situaciones de riesgo y vulnerabilidad”.

El programa de empoderamiento de mujeres con diversidad funcional nace tras constatar que existen más de 2.616 rubinenses con un grado de discapacidad certificado superior al 33% ─según datos de 2020─ que a menudo se sienten excluidas de ciertos ámbitos y carentes de derechos fundamentales. Las participantes han sido derivadas desde diferentes servicios y entidades, como la Oficina de Atención a la Diversidad Funcional, los Servicios Sociales Básicos, el Servicio de Salud Pública, el Servicio de Información y Atención a la Mujer o los centros de atención primaria, entre otros.