El proyecto LIFE SAVING-E instala una planta piloto en la depuradora de Rubí para comprobar la eficacia de su tecnología
Los concejales Moisés Rodríguez y Rafael Güeto han asistido a la inauguración de esta instalación, que quiere convertir las EDAR actuales en infraestructuras de consumo neutro o, incluso, productoras de energía
El concejal de Medio Ambiente, Moisés Rodríguez, el concejal del Área de Desarrollo Económico Local, Rafael Güeto, el director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), Jordi Agustí, y la rectora de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), Margarita Arboix, han asistido este jueves a la inauguración de la planta piloto que se ha instalado en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Rubí en el marco del proyecto LIFE SAVING-E. El objetivo de esta iniciativa es transformar las plantas de tratamiento de aguas residuales, que son grandes consumidoras de energía, en infraestructuras de consumo neutro o, incluso, productoras de energía. Un equipo de investigadores de la UAB ha ideado la tecnología que debe permitir lograr esta conversión y ha escogido la EDAR de Rubí para ponerla a prueba a gran escala.
El tratamiento de las aguas residuales urbanas se realiza en las estaciones depuradoras y consiste en una combinación de procesos fisicoquímicos y biológicos ─básicamente, los contaminantes eliminados son materia orgánica, nitrógeno y fósforo─. Son sistemas eficientes en cuanto a la eliminación de los contaminantes, pero no en cuanto al consumo de energía.
Con el objetivo de diseñar estaciones depuradoras urbanas autosostenibles energéticamente, investigadores del grupo de investigación GENOCOV de la UAB han desarrollado una tecnología que pretende transformar las EDAR actuales consumidoras de energía en sistemas de consumo cero o, incluso, generadores de energía, pudiendo llegar a producir 9 kWh/habitante/año. Concretamente, esta tecnología actúa sobre el proceso de eliminación de nitrógeno, sustituyendo el tratamiento clásico de nitrificación-desnitrificación por un sistema autotrófica de dos etapas consistente en nitritación parcial seguida de un reactor con bacterias anammox.
Tras comprobar el éxito del proceso en el laboratorio, ahora hay que demostrar su correcto funcionamiento a escala piloto. Si la planta piloto de Rubí obtiene los resultados esperados ─incremento del 50% en la producción de biogás, reducción del 10% en el vertido de nitrógeno, ahorro de un 30% de consumo energético en el proceso de eliminación de nitrógeno y de un 40% de consumo energético en el proceso global de la EDAR, reducción de un 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero─, el sistema se podrá llevar a cabo a escala real y extrapolar a otras estaciones depuradoras de Europa.
La importancia de la colaboración
En el acto de inauguración de la planta piloto, el concejal de Medio Ambiente ha vinculado esta iniciativa con el trabajo que se está haciendo en Rubí a favor de un cambio de modelo energético: "Si el proyecto Rubí Brilla ha avanzado hasta consolidarse más allá de nuestras fronteras ha sido gracias a que siempre ha apostado por el trabajo conjunto entre la empresa privada, el mundo académico y la administración pública. Nos necesitamos unos a otros si queremos alcanzar altas cotas de satisfacción y reconocimiento. Y el proyecto que presentamos hoy demuestra claramente que el futuro pasa por esta colaboración mutua". Rodríguez ha incidido en el papel determinante que tienen los municipios a la hora de conseguir un mundo más sostenible: "No esperamos que alguien venga de fuera para indicarnos el camino. Tenemos el convencimiento de que somos los gobiernos locales y las ciudades los que tenemos el compromiso de implantar políticas dirigidas a reducir los costes en energía. A pequeña escala, pero liderando este cambio e incorporando en el camino a otras ciudades".
El resto de agentes implicados también han destacado la colaboración entre instituciones, empresa privada y mundo universitario, que ha permitido hacer realidad "un proyecto de investigación y de transferencia que pretende cambiar el paradigma de las depuradoras", tal como ha dicho el investigador Julián Carrera. En este sentido, la rectora de la UAB, Margarita Arboix, ha reivindicado la importancia de la transferencia tecnológica y de conocimiento: "Tenemos que devolver a la sociedad lo que la sociedad nos da. Este acto es esperanzador [...], tenemos que trabajar y ser capaces de llevar innovación". En la misma línea se ha pronunciado Jordi Agustí, director de la ACA, cuando ha señalado los tres pilares de esta iniciativa: "sostenibilidad, innovación y colaboración".
El proyecto SAVING-E Two-Stage Autotrophic N-remoVal for maINstream sewaGe trEatment), que cuenta con un presupuesto de 1.169.068 euros, está cofinanciado por el programa europeo Life+ (58% del total). Los socios del proyecto son la UAB, Depuración de Aguas del Mediterráneo (DAM) ─la empresa explotadora de la EDAR de Rubí─, la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) y la Plataforma Europea del agua (WssTP).