Las familias de los rubinenses deportados durante el nazismo protagonizarán el acto de recepción de las "Stolpersteine"

El próximo lunes 21 de septiembre, el edificio de El Celler acogerá el acto de recepción institucional de las Stolpersteine, los adoquines que recuerdan a los once deportados rubinenses durante el nazismo. Las obras conmemorativas del artista alemán Gunter Demnig llegaron a Rubí el pasado julio y, durante los días 22 y 23 de este mes, serán instaladas finalmente en aquellos puntos de la ciudad que fueron la última residencia de los homenajeados.

El acto del lunes tendrá como protagonistas a las familias de los once rubinenses deportados, que de este modo podrán tener un contacto cercano con las Stolpersteine ​​antes de su colocación. El encuentro estará presidido por la alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, y contará también con la participación de los concejales de Memoria Histórica, Pau Navarro Cano, y de Promoción y Dinamización Cultural, Moisés Rodríguez Cantón, además de representantes del Memorial Democràtic, el Amical Mauthausen, miembros de la Mesa de la Memoria Histórica e historiadores locales. La Escuela Municipal de Música Pere Burés tomará parte con una pequeña actuación en recuerdo de las víctimas.

El concejal de Memoria Historia ha explicado que el formato del acto se ha modificado respecto a la previsión inicial "para que todas las familias tuvieran la oportunidad de establecer un vínculo emocional con los adoquines. Entendemos que es un elemento cargado de significado para ellas y por eso hemos creído conveniente generar este espacio solemne previo a su instalación". En esta misma línea, la alcaldesa ha destacado la importancia del homenaje: "No fue fácil conseguir que Rubí dispusiera de estas Stolpersteine. Ahora tenemos la satisfacción de poder honrar, finalmente, la memoria de estos once rubinenses, que es sin duda el más importante, pero también de sumar un nuevo instrumento para el aprendizaje de los más jóvenes".

El acto de recepción de las Stolpersteine ​​tendrá el aforo restringido y se celebrará siguiendo todas las recomendaciones sanitarias para prevenir la Covid-19. Inicialmente se tenía que hacer en los jardines del Ateneu pero, ante el riesgo de lluvia, se ha trasladado al interior de El Celler. Posteriormente, durante los días 22 y 23 de septiembre, personal técnico del Ayuntamiento será el encargado de instalalar los adoquines en su emplazamiento definitivo.

El proyecto de las Stolpersteine ​​nació en los años 90, cuando Demnig se interesó por conmemorar artísticamente a los hombres y mujeres deportados y asesinados por nacionasocialismo. El alemán creó este monumento exhortatorio de latón, donde consta el nombre de la víctima y algunos de sus datos esenciales. Las Stolpersteine ​​se sitúan en las aceras, próximas a la última residencia de las personas homenajeadas antes de su arresto o deportación.

Si no hubiera sido por la situación de pandemia, el propio artista las habría colocado en Rubí. Y es que Demnig concibe este trabajo manual como parte de un proceso artístico que tiene por objetivo honrar la memoria de las víctimas y evitar el olvido.

En nuestra ciudad se colocarán once Stolpersteine ​​en recuerdo de Enric Aragonès Campderròs, Joaquim Aragonès Campderròs, Francesc Bartroli Creus, Gregorio Beltran Jardiel, Joaquim Cardona Pareras, Jesús Montroig Cuartero, Antoni Òdena Òdena, Antoni Pereña Salas, Joaquim Rusiñol Folch, Andreu Vidal Almirall y José López de Letona Angulo. Aunque algunos de estos hombres lograron sobrevivir hasta la liberación de los campos de concentración nazis, la mayoría fueron asesinados en ellos.

Actualmente hay más de 75.000 adoquines de este tipo distribuidos en una veintena de países.

Mesa de la Memoria Histórica
Los detalles sobre la recepción e instalación de las Stolpersteine ​​se han compartido este martes en una nueva sesión de la Mesa de la Memoria Histórica. Durante el encuentro, también se ha hecho un repaso de otras cuestiones relacionadas con esta temática. Así, por ejemplo, se ha recordado que el próximo 28 de septiembre se convocará la Comisión del nomenclátor para seguir trabajando en el cambio de nombre de la plaza Nova por plaza Neus Catalán i Pallejà; y se ha explicado que pronto se enviará la segunda carta avisando a las comunidades de propietarios de once edificios de viviendas de la ciudad de la próxima retirada de las placas con simbología franquista que permanecen en sus fachadas. Los miembros de la Mesa también han podido confirmar que se sigue trabajando en el hermanamiento con Els Guiamets, población natal de Neus Català i Pallejà, y en la investigación sobre el posible refugio antiaéreo situado bajo la calle Cadmo.