Las "Stolpersteine" en memoria de las víctimas rubinenses del nazismo se exponen en la Biblioteca
La ciudadanía podrá visitarlas en el equipamiento municipal durante los días previos a su instalación, que tendrá lugar el próximo 21 de septiembre
La Biblioteca Municipal Mestre Martí Tauler muestra hasta el 18 de septiembre las once Stolpersteine que honran la memoria de los deportados rubinenses durante el nazismo. La ciudadanía podrá ver de cerca los adoquines conmemorativos del artista alemán Gunter Demnig en los días previos a su instalación, que tendrá lugar el próximo 21 de septiembre.
Las Stolpersteine llegaron a la ciudad el pasado mes de julio y, durante estas últimas semanas, han sido custodiadas en la casa consistorial. Desde este martes, se exponen en el escaparate de la Biblioteca acompañadas de unos paneles informativos y una selección de libros relacionados con los campos de concentración y la represión fascista, con la voluntad de hacer partícipe de este homenaje al conjunto de la ciudadanía. "Ubicar las Stolpersteine en la Biblioteca de la ciudad no es solo un acto de descentralización, es una reivindicación de cómo la cultura (leer, investigar...) es también una herramienta contra el fascismo", ha declarado el concejal de Memoria Histórica, Pau Navarro Cano. Por su parte, la alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, ha animado a los rubinenses a aprovechar esta oportunidad de ver todos las adoquines juntas: "Son en apariencia un homenaje sencillo pero, cuando las tienes cerca y lees los nombres que hay grabados, no puedes evitar emocionarte con las historias personales que representan. Es importante este ejercicio de sensibilización, especialmente de cara a los más jóvenes".
Gunter Demnig tenía que visitar Rubí el pasado 9 de abril para instalar personalmente las Stolpersteine, pero la situación de emergencia sanitaria provocada por la Covid-19 lo terminó impidiendo. El Memorial Democràtic ha reprogramado el acto para el 21 de septiembre, aunque por la misma pandemia éste se hará sin la intervención del artista.
Como ya estaba previsto, se llevará a cabo delante del Ayuntamiento, en la calle Narcís Menard, y consistirá en la instalación de los adoquines correspondientes a dos de los rubinenses homenajeados: los hermanos Enric y Joaquim Campderròs. El resto de Stolpersteine serán colocadas ese mismo día por personal del Ayuntamiento en aquellos puntos de la ciudad que fueron la última residencia de los deportados.
En memoria de las víctimas
El proyecto de las Stolpersteine nació en los años 90, cuando Demnig se interesó por conmemorar artísticamente a los hombres y mujeres deportados y asesinados por el nacionasocialismo. El alemán creó este monumento exhortatorio de latón, donde consta el nombre de la víctima y algunos de sus datos esenciales. Las Stolpersteine se sitúan en las aceras, próximas a la última residencia de las personas homenajeadas antes de su arresto o deportación.
Si no hubiera sido por la situación de pandemia, el propio artista las habría colocado en Rubí. Y es que Demnig concibe este trabajo manual como parte de un proceso artístico que tiene por objetivo honrar la memoria de las víctimas y evitar el olvido.
En nuestra ciudad se colocarán once Stolpersteine en recuerdo de Enric Aragonès Campderròs, Joaquim Aragonès Campderròs, Francesc Bartroli Creus, Gregorio Beltran Jardiel, Joaquim Cardona Pareras, Jesús Montroig Cuartero, Antoni Òdena Òdena, Antoni Pereña Salas, Joaquim Rusiñol Folch, Andreu Vidal Almirall y José López de Letona Angulo. Aunque algunos de estos hombres lograron sobrevivir hasta la liberación de los campos de concentración nazis, la mayoría fueron asesinados en ellos.
Actualmente hay más de 60.000 adoquines de este tipo distribuidos en más de 1.800 ciudades de una veintena de países.
Las Stolpersteine llegaron a la ciudad el pasado mes de julio y, durante estas últimas semanas, han sido custodiadas en la casa consistorial. Desde este martes, se exponen en el escaparate de la Biblioteca acompañadas de unos paneles informativos y una selección de libros relacionados con los campos de concentración y la represión fascista, con la voluntad de hacer partícipe de este homenaje al conjunto de la ciudadanía. "Ubicar las Stolpersteine en la Biblioteca de la ciudad no es solo un acto de descentralización, es una reivindicación de cómo la cultura (leer, investigar...) es también una herramienta contra el fascismo", ha declarado el concejal de Memoria Histórica, Pau Navarro Cano. Por su parte, la alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, ha animado a los rubinenses a aprovechar esta oportunidad de ver todos las adoquines juntas: "Son en apariencia un homenaje sencillo pero, cuando las tienes cerca y lees los nombres que hay grabados, no puedes evitar emocionarte con las historias personales que representan. Es importante este ejercicio de sensibilización, especialmente de cara a los más jóvenes".
Gunter Demnig tenía que visitar Rubí el pasado 9 de abril para instalar personalmente las Stolpersteine, pero la situación de emergencia sanitaria provocada por la Covid-19 lo terminó impidiendo. El Memorial Democràtic ha reprogramado el acto para el 21 de septiembre, aunque por la misma pandemia éste se hará sin la intervención del artista.
Como ya estaba previsto, se llevará a cabo delante del Ayuntamiento, en la calle Narcís Menard, y consistirá en la instalación de los adoquines correspondientes a dos de los rubinenses homenajeados: los hermanos Enric y Joaquim Campderròs. El resto de Stolpersteine serán colocadas ese mismo día por personal del Ayuntamiento en aquellos puntos de la ciudad que fueron la última residencia de los deportados.
En memoria de las víctimas
El proyecto de las Stolpersteine nació en los años 90, cuando Demnig se interesó por conmemorar artísticamente a los hombres y mujeres deportados y asesinados por el nacionasocialismo. El alemán creó este monumento exhortatorio de latón, donde consta el nombre de la víctima y algunos de sus datos esenciales. Las Stolpersteine se sitúan en las aceras, próximas a la última residencia de las personas homenajeadas antes de su arresto o deportación.
Si no hubiera sido por la situación de pandemia, el propio artista las habría colocado en Rubí. Y es que Demnig concibe este trabajo manual como parte de un proceso artístico que tiene por objetivo honrar la memoria de las víctimas y evitar el olvido.
En nuestra ciudad se colocarán once Stolpersteine en recuerdo de Enric Aragonès Campderròs, Joaquim Aragonès Campderròs, Francesc Bartroli Creus, Gregorio Beltran Jardiel, Joaquim Cardona Pareras, Jesús Montroig Cuartero, Antoni Òdena Òdena, Antoni Pereña Salas, Joaquim Rusiñol Folch, Andreu Vidal Almirall y José López de Letona Angulo. Aunque algunos de estos hombres lograron sobrevivir hasta la liberación de los campos de concentración nazis, la mayoría fueron asesinados en ellos.
Actualmente hay más de 60.000 adoquines de este tipo distribuidos en más de 1.800 ciudades de una veintena de países.