Rubí clama 'Basta ciclistas muertos en las carreteras'
Una pedalada multitudinaria y una concentración ante el Ayuntamiento de Rubí ha servido para rendir homenaje a Miguel Moya Lara y José María de la Torre Morales, los dos integrantes del Club Ciclista Rubí que murieron atropellados el pasado 21 de agosto en Castellbisbal
Más de 4.000 ciclistas de toda Cataluña han pedaleado este sábado a Rubí para exigir mayor seguridad en las carreteras y rendir homenaje a Miguel Moya Lara y José María de la Torre Morales, los dos integrantes del Club Ciclista Rubí que murieron atropellados hace dos semanas en Castellbisbal. El acto organizado por la Federación Catalana de Ciclismo y el Ayuntamiento de Rubí bajo el lema 'Basta ciclistas muertos en las carreteras' ha culminado en la plaza Pere Aguilera con una concentración multitudinaria y un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas del siniestro del 21 de agosto.
Ana María Martínez Martínez, alcaldesa de Rubí, ha recordado a Miguel y José María como deportistas que habían encontrado en el ciclismo una actividad ilusionante que disfrutaban compartiendo con los compañeros de club. “ El deporte es muchas cosas buenas. Es salud física y mental, es superación, es compañerismo... Una fuente de felicidad y un perfecto transmisor de valores. Nadie debería perder la vida por practicarlo, por coger una bicicleta y salir a hacer salud con un grupo de amigos. Como tampoco nadie debería abandonar el deporte que le gusta por miedo ”, ha dicho la máxima edil. Martínez se ha sumado a la reivindicación de los ciclistas y ha dicho que en casos como el del 21 de agosto son necesarias " medidas contundentes, penas acordes a la gravedad del delito, que de verdad tengan un efecto disuasivo sobre los infractores ".
Raimon Salvat Devesa, miembro del Club Ciclista Rubí, ha asegurado que " la convivencia es posible cuando los conductores somos personas responsables y formadas, como afortunadamente somos la mayoría ". Salvat Devesa ha expuesto que la mayoría de coches realizan los adelantamientos a ciclistas de forma correcta: respetando la distancia lateral de seguridad y reduciendo la velocidad. “ Cuando nos encontramos con actitudes agresivas y violentas, el camino de la educación ya ha llegado tarde. Sólo queda el camino punitivo [...] por eso creemos necesario el endurecimiento de las penas para los conductores implicados en los atropellos de ciclistas: queremos salido a practicar nuestro deporte sin tener que temer por nuestras vidas ”, ha concluido.
En nombre de la Federación Catalana de Ciclismo, su presidente Joaquim Viaplana Boloix, ha querido mostrar el calor del colectivo ciclista “ a las familias de Rubí que han perdido a dos personas muy queridas, dos ciclistas que se han dejado la vida en carretera cuando su única culpa era salir en bicicleta con los amigos ”. La Federación pide que se apliquen criterios ciclistas para circular con seguridad en vías y espacios públicos, que los conductores a motor conozcan bien la normativa de tráfico, que se amplíen los controles policiales para echar de las carreteras a los conductores homicidas, que las leyes sean justas y proporcionadas por los ciclistas y que jueces y fiscales actúen con contundencia ante hechos como el de Castellbisbal y sentencian penas máximas.
La concentración ante el Ayuntamiento de Rubí se cerró con un minuto de silencio en memoria de las víctimas del atropello del 21 de agosto y un sentido aplauso a sus familias.
El atropello que acabó con la vida de ambos ciclistas rubinenses se produjo en la carretera C-243c, a la altura de la estación de Ferrocarriles de la Generalidad de Cataluña (FGC) Martorell-Vila. Un vehículo embistió a un grupo de ocho integrantes del Club Ciclista Rubí, provocando la muerte de dos de ellos e hiriendo a otros tres, uno de ellos de extrema gravedad. Los demás ciclistas que formaban parte del grupo resultaron ilesos. Pocas horas después del atropello, los Mossos d'Esquadra pudieron detener al presunto autor de los hechos en Martorell. La juez declaró prisión provisional.