El Ayuntamiento alegará la autorización de la Generalitat para que Can Carreras sea un vertedero de residuos no peligrosos
La Direcció General de Qualitat Ambiental se ha pronunciado favorablemente a la demanda del Grupo Vertispania.
La Direcció General de Qualitat Ambiental, dependiente del Departament de Territorio i Sostenibilitat de la Generalitat de Catalunya, ha hecho pública una propuesta de resolución en la que se posiciona a favor de otorgar la autorización ambiental al Grupo FSM Vertispania, que gestiona el vertedero de Can Carreras, para que pueda verter residuos 'no peligrosos' en esta instalación. Esto, a pesar de los informes negativos remitidos por el Ayuntamiento de Rubí en octubre del año pasado y las sesenta alegaciones que hicieron llegar a Qualitat Ambiental tanto el consistorio como los vecinos residentes en las urbanizaciones y la entidad ecologista CEPNA.
La Direcció General, que depende políticamente del conseller Lluís Recoder, ha informado el consistorio de su decisión coincidiendo con las vacaciones de verano, 'con agostidad', como ha dicho irónicamente el concejal de Planificación, ecología urbana y seguridad, Manuel Velasco. Este organismo ha establecido el 30 de septiembre como fecha máxima para que el Ayuntamiento pueda presentar sus alegaciones a la propuesta de resolución, 'lo que evidentemente vamos a hacer, porque mantenemos nuestro posicionamiento contrario a que Can Carreras no sea única y exclusivamente lo que es ahora mismo, un depósito controlado de residuos inertes', ha puntualizado Velasco.
Qualitat Ambiental se escuda en decisiones judiciales y competencias municipales para argumentar su propuesta de otorgar la licencia ambiental como depósito controlado de residuos no peligrosos.
La Generalitat se refiere a la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en mayo de 2010 donde, según explica la ponencia ambiental, 'queda claro que cuando el titular entró la solicitud quería regularizar su actividad y también queda claro que admite el ejercicio de la actividad en su integridad ', o lo que es lo mismo según palabras de Velasco,' que con el simple hecho de evidenciar que la actividad se está haciendo mal se reconoce que esta actividad existe y, por tanto, ya la podemos legalizar, con lo que estamos absolutamente en desacuerdo '.
El concejal se ha mostrado sorprendido ante este argumento, pero aún ha manifestado mayor sorpresa ante las alusiones que la ponencia hace a competencias municipales como respuesta a las alegaciones ambientales presentadas por el Ayuntamiento de Rubí, los vecinos y CEPNA.
Velasco también ha anunciado que si finalmente Qualitat Ambiental otorga la licencia a Grupo FSM Vertispania para verter residuos 'no peligrosos' (lo que se conoce como fase II) en Can Carreras, 'el Ayuntamiento interpondrá un contencioso administrativo para que sea la justicia quien se pronuncie al respecto'.
Según la Generalitat, actualmente el vertedero de Can Carreras dispone de 2 depósitos de residuos con una capacidad de cerca de 950.000 m3, de los cuales ya se han utilizado 195.000 m3. Hasta rellenar el resto se estima que la instalación tendría una vida de 13 años.
Transparencia informativa
La alcaldesa, Carme García, y el concejal de Planificación, ecología urbana y seguridad, Manuel Velasco, trasladaron ayer toda esta información tanto a los portavoces de los diferentes grupos municipales como a los representantes de los vecinos que forman parte de la Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de las Urbanizaciones del Noroeste (CAVUNO), en el marco de la política de transparencia informativa del equipo de gobierno.
Quejas por malos olores
El Ayuntamiento de Rubí recibe un flujo constante de quejas por malos olores provenientes del vertedero de Can Carreras formuladas por vecinos de la zona. Sólo en los tres últimos meses han dado unas 250 quejas vecinales.
El departamento de Medio Natural del consistorio y la Policía Local han llevado a cabo toda una serie de inspecciones al respecto. La administración local ha remitido todos estos informes a la Agència de Residus de Catalunya para su conocimiento, haga los controles pertinentes y adopte las medidas que considere oportunas. Además, también ha solicitado un estudio de olores a la Agència de Residus de Catalunya para disponer de los parámetros olfativos para saber el grado de salud ambiental de la zona.
Los malos olores se intensifican durante los meses de más calor y cuando se registran presiones bajas.
La Direcció General, que depende políticamente del conseller Lluís Recoder, ha informado el consistorio de su decisión coincidiendo con las vacaciones de verano, 'con agostidad', como ha dicho irónicamente el concejal de Planificación, ecología urbana y seguridad, Manuel Velasco. Este organismo ha establecido el 30 de septiembre como fecha máxima para que el Ayuntamiento pueda presentar sus alegaciones a la propuesta de resolución, 'lo que evidentemente vamos a hacer, porque mantenemos nuestro posicionamiento contrario a que Can Carreras no sea única y exclusivamente lo que es ahora mismo, un depósito controlado de residuos inertes', ha puntualizado Velasco.
Qualitat Ambiental se escuda en decisiones judiciales y competencias municipales para argumentar su propuesta de otorgar la licencia ambiental como depósito controlado de residuos no peligrosos.
La Generalitat se refiere a la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en mayo de 2010 donde, según explica la ponencia ambiental, 'queda claro que cuando el titular entró la solicitud quería regularizar su actividad y también queda claro que admite el ejercicio de la actividad en su integridad ', o lo que es lo mismo según palabras de Velasco,' que con el simple hecho de evidenciar que la actividad se está haciendo mal se reconoce que esta actividad existe y, por tanto, ya la podemos legalizar, con lo que estamos absolutamente en desacuerdo '.
El concejal se ha mostrado sorprendido ante este argumento, pero aún ha manifestado mayor sorpresa ante las alusiones que la ponencia hace a competencias municipales como respuesta a las alegaciones ambientales presentadas por el Ayuntamiento de Rubí, los vecinos y CEPNA.
Velasco también ha anunciado que si finalmente Qualitat Ambiental otorga la licencia a Grupo FSM Vertispania para verter residuos 'no peligrosos' (lo que se conoce como fase II) en Can Carreras, 'el Ayuntamiento interpondrá un contencioso administrativo para que sea la justicia quien se pronuncie al respecto'.
Según la Generalitat, actualmente el vertedero de Can Carreras dispone de 2 depósitos de residuos con una capacidad de cerca de 950.000 m3, de los cuales ya se han utilizado 195.000 m3. Hasta rellenar el resto se estima que la instalación tendría una vida de 13 años.
Transparencia informativa
La alcaldesa, Carme García, y el concejal de Planificación, ecología urbana y seguridad, Manuel Velasco, trasladaron ayer toda esta información tanto a los portavoces de los diferentes grupos municipales como a los representantes de los vecinos que forman parte de la Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de las Urbanizaciones del Noroeste (CAVUNO), en el marco de la política de transparencia informativa del equipo de gobierno.
Quejas por malos olores
El Ayuntamiento de Rubí recibe un flujo constante de quejas por malos olores provenientes del vertedero de Can Carreras formuladas por vecinos de la zona. Sólo en los tres últimos meses han dado unas 250 quejas vecinales.
El departamento de Medio Natural del consistorio y la Policía Local han llevado a cabo toda una serie de inspecciones al respecto. La administración local ha remitido todos estos informes a la Agència de Residus de Catalunya para su conocimiento, haga los controles pertinentes y adopte las medidas que considere oportunas. Además, también ha solicitado un estudio de olores a la Agència de Residus de Catalunya para disponer de los parámetros olfativos para saber el grado de salud ambiental de la zona.
Los malos olores se intensifican durante los meses de más calor y cuando se registran presiones bajas.