El pleno aprueba un convenio urbanístico que garantiza la actividad de Ficosa en Rubí y el mantenimiento de más de 300 puestos de trabajo
Los usos de los terrenos pasan de ser industriales a residenciales
El Pleno del Ayuntamiento de Rubí ha acordado incorporar en el documento del Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) actualmente en trámite, la delimitación del nuevo sector de Can Pujol como espacio de suelo urbanizable de uso residencial.
El convenio, aprobado con los votos favorables del equipo de gobierno (PSC y ERC), PP y CiU, la abstención de ICV-EUiA y el voto contrario de ACR (Alternativa Ciudadana de Rubí), también contempla el traslado de Fico Transpar y Fico Triad a otra finca de uso industrial en Rubí, así como el mantenimiento del puesto de trabajo de más de 300 trabajadores de estas dos plantas del grupo FICOSA Internacional.
El terreno donde se trasladarán las fábricas lo decidirá la empresa, entre las diferentes ofertas de las que dispone actualmente, como máximo el 20 de diciembre de 2009, mientras que el traslado de las líneas de producción se produciría en un plazo máximo de 6 meses a partir de la aprobación definitiva del POUM.
En cuanto a los usos del nuevo sector residencial, el 65% de las 20 hectáreas de la nueva zona residencial se destinará a zonas verdes (6,2 ha), infraestructuras viarias (4,2) y equipamientos (2,6), mientras que el 35% restante se destinará a la construcción de un máximo de 1.378 viviendas, de los cuales, un máximo de 706 serán de renta libre y un mínimo de 672 serán de protección pública, lo que representa un 48,7% del total.
Los mismos hermanos Pujol Artigas entregarán 4,5 millones de € al Ayuntamiento que se invertirán en futuros equipamientos o infraestructuras contemplados en el POUM.
En beneficio de los trabajadores de FICOSA
La propuesta de POUM contemplaba inicialmente la transformación de la zona de Can Pujol en residencial atendiendo a los criterios que el nuevo planeamiento prevé para zonas industriales que han quedado rodeadas por trama urbana como consecuencia de un crecimiento urbanístico inadecuado.
El documento que finalmente llegó al Pleno el 20 de mayo de 2008 y que se aprobó con el voto favorable de la mayoría de los grupos municipales, a excepción de ICV-EUIA y ARC, no incluyó este cambio de uso de los terrenos por petición expresa de los trabajadores de FICOSA que consideraron la medida como un elemento que podía favorecer la marcha de la empresa del municipio y la pérdida de sus puestos de trabajo.
La dirección de FICOSA manifestó dificultades para garantizar la permanencia de la empresa en Rubí si se impedía finalmente el uso residencial en Can Pujol.
De nuevo esta situación llevó a que los trabajadores de las plantas de Rubí trasladaran al consistorio la preocupación por su futuro laboral. Fue entonces cuando la alcaldesa, Carme García, acompañada de representantes de todas las formaciones políticas municipales mantuvo un encuentro en el mes de marzo con las dos partes: Dirección y Comité de empresa. Durante la reunión el consistorio invitó a negociar para encontrar una solución beneficiosa para ambas partes, dejando claro que el Ayuntamiento no aprobaría ningún cambio de usos de los terrenos si los trabajadores de FICOSA no lo pedían.
El pasado 22 de junio, los representantes de la empresa y los trabajadores firmaban un acuerdo por el que FICOSA se compromete, por un lado, a que Rubí sea la sede de la nueva planta de la firma una vez se haga el traslado de las dos fábricas actuales, y por otro, a mantener un mínimo de 310 puestos de trabajo durante los próximos 5 años y a reducir el excedente de plantilla actual de 50 trabajadores con prejubilaciones y bajas y recolocaciones voluntarias.
La firma de este acuerdo es la que ha posibilitado que hoy se haya presentado y aprobado en Pleno el convenio urbanístico que, según ha explicado la alcaldesa, Carme García, 'garantiza un urbanismo equilibrado en la ciudad y lo que es más importante: la permanencia de la empresa en la ciudad y que los trabajadores de FICOSA preserven sus puestos de trabajo. Que 300 trabajadores mantengan el trabajo en estos momentos de crisis no es fácil y es necesario que nos felicitamos'.
El convenio, aprobado con los votos favorables del equipo de gobierno (PSC y ERC), PP y CiU, la abstención de ICV-EUiA y el voto contrario de ACR (Alternativa Ciudadana de Rubí), también contempla el traslado de Fico Transpar y Fico Triad a otra finca de uso industrial en Rubí, así como el mantenimiento del puesto de trabajo de más de 300 trabajadores de estas dos plantas del grupo FICOSA Internacional.
El terreno donde se trasladarán las fábricas lo decidirá la empresa, entre las diferentes ofertas de las que dispone actualmente, como máximo el 20 de diciembre de 2009, mientras que el traslado de las líneas de producción se produciría en un plazo máximo de 6 meses a partir de la aprobación definitiva del POUM.
En cuanto a los usos del nuevo sector residencial, el 65% de las 20 hectáreas de la nueva zona residencial se destinará a zonas verdes (6,2 ha), infraestructuras viarias (4,2) y equipamientos (2,6), mientras que el 35% restante se destinará a la construcción de un máximo de 1.378 viviendas, de los cuales, un máximo de 706 serán de renta libre y un mínimo de 672 serán de protección pública, lo que representa un 48,7% del total.
Los mismos hermanos Pujol Artigas entregarán 4,5 millones de € al Ayuntamiento que se invertirán en futuros equipamientos o infraestructuras contemplados en el POUM.
En beneficio de los trabajadores de FICOSA
La propuesta de POUM contemplaba inicialmente la transformación de la zona de Can Pujol en residencial atendiendo a los criterios que el nuevo planeamiento prevé para zonas industriales que han quedado rodeadas por trama urbana como consecuencia de un crecimiento urbanístico inadecuado.
El documento que finalmente llegó al Pleno el 20 de mayo de 2008 y que se aprobó con el voto favorable de la mayoría de los grupos municipales, a excepción de ICV-EUIA y ARC, no incluyó este cambio de uso de los terrenos por petición expresa de los trabajadores de FICOSA que consideraron la medida como un elemento que podía favorecer la marcha de la empresa del municipio y la pérdida de sus puestos de trabajo.
La dirección de FICOSA manifestó dificultades para garantizar la permanencia de la empresa en Rubí si se impedía finalmente el uso residencial en Can Pujol.
De nuevo esta situación llevó a que los trabajadores de las plantas de Rubí trasladaran al consistorio la preocupación por su futuro laboral. Fue entonces cuando la alcaldesa, Carme García, acompañada de representantes de todas las formaciones políticas municipales mantuvo un encuentro en el mes de marzo con las dos partes: Dirección y Comité de empresa. Durante la reunión el consistorio invitó a negociar para encontrar una solución beneficiosa para ambas partes, dejando claro que el Ayuntamiento no aprobaría ningún cambio de usos de los terrenos si los trabajadores de FICOSA no lo pedían.
El pasado 22 de junio, los representantes de la empresa y los trabajadores firmaban un acuerdo por el que FICOSA se compromete, por un lado, a que Rubí sea la sede de la nueva planta de la firma una vez se haga el traslado de las dos fábricas actuales, y por otro, a mantener un mínimo de 310 puestos de trabajo durante los próximos 5 años y a reducir el excedente de plantilla actual de 50 trabajadores con prejubilaciones y bajas y recolocaciones voluntarias.
La firma de este acuerdo es la que ha posibilitado que hoy se haya presentado y aprobado en Pleno el convenio urbanístico que, según ha explicado la alcaldesa, Carme García, 'garantiza un urbanismo equilibrado en la ciudad y lo que es más importante: la permanencia de la empresa en la ciudad y que los trabajadores de FICOSA preserven sus puestos de trabajo. Que 300 trabajadores mantengan el trabajo en estos momentos de crisis no es fácil y es necesario que nos felicitamos'.