La alcaldesa de Rubí visita la empresa Andersen, dedicada a la salud y nutrición animal
Esta es una de las compañías que ha participado en el Proyecto Cuadro de Mando de la OSE.
La alcaldesa de Rubí, Carme García, y el director del Área de Promoción Económica y Empleo del Ayuntamiento, Rafael Güeto, han visitado las instalaciones de la empresa rubinense Andersen SA acompañados por el director gerente de la compañía, Lau Andersen, y otros directivos de la firma.
Durante la reunión previa a la visita a las instalaciones, la alcaldesa se ha interesado por la situación actual de la empresa y por si la crisis económica les había afectado significativamente. Carme García también ha querido conocer más datos sobre los diferentes registros y patentes de la firma. Por su parte, Lau Andersen ha explicado a la alcaldesa que el primer probiótico que se introdujo en la alimentación animal en la Unión Europea fue uno de sus productos, fabricado en el centro de producción del polígono La Llana de Rubí.
Andersen SA es una empresa dedicada a la fabricación y comercialización de aditivos y materias químicas para elaborar productos destinados a la salud y la nutrición animal. Y ha sido una de las 23 firmas de la ciudad que ha participado en el Proyecto Cuadro de Mando 2010, impulsado por la Oficina de Servicios a la Empresa (OSE), en el que se ha implicado completamente.
La empresa se creó en 1974 y, a principios de los años '80, inició una colaboración con la compañía japonesa Toyo Jozo, que culminó con la creación de una nueva empresa, llamada Asahi Chemicals, en el año 1988. Esta nueva compañía se instaló en Rubí, donde empezó a fabricar el probiótico Toyocerin, uno de sus productos estrella. En 2005, Andersen (socio minoritario) adquirió el 100% de Asahi Chemicals, que rebautizó con su nombre actual: Rubinum. Desde entonces, ambas firmas comparten instalaciones en el polígono industrial La Llana de Rubí.
Andersen fue pre-seleccionada en la pasada edición de la Nit de l’Empresa 2010, en la categoría de fomento de la calidad del empleo. Y es que a pesar de ser una empresa pequeña, cuenta con 25 trabajadores, más de la mitad de los cuales (14) son mujeres. Además, para poder ofrecer un servicio técnico de calidad a sus clientes, necesita un equipo humano con un alto grado de formación, reflejado en una plantilla de la que más del 80% dispone de titulación universitaria, entre la que promueven la formación continuada para dar estabilidad a los puestos de trabajo y un horario adecuado para conciliar la vida familiar y laboral, entre otros aspectos.
Durante la reunión previa a la visita a las instalaciones, la alcaldesa se ha interesado por la situación actual de la empresa y por si la crisis económica les había afectado significativamente. Carme García también ha querido conocer más datos sobre los diferentes registros y patentes de la firma. Por su parte, Lau Andersen ha explicado a la alcaldesa que el primer probiótico que se introdujo en la alimentación animal en la Unión Europea fue uno de sus productos, fabricado en el centro de producción del polígono La Llana de Rubí.
Andersen SA es una empresa dedicada a la fabricación y comercialización de aditivos y materias químicas para elaborar productos destinados a la salud y la nutrición animal. Y ha sido una de las 23 firmas de la ciudad que ha participado en el Proyecto Cuadro de Mando 2010, impulsado por la Oficina de Servicios a la Empresa (OSE), en el que se ha implicado completamente.
La empresa se creó en 1974 y, a principios de los años '80, inició una colaboración con la compañía japonesa Toyo Jozo, que culminó con la creación de una nueva empresa, llamada Asahi Chemicals, en el año 1988. Esta nueva compañía se instaló en Rubí, donde empezó a fabricar el probiótico Toyocerin, uno de sus productos estrella. En 2005, Andersen (socio minoritario) adquirió el 100% de Asahi Chemicals, que rebautizó con su nombre actual: Rubinum. Desde entonces, ambas firmas comparten instalaciones en el polígono industrial La Llana de Rubí.
Andersen fue pre-seleccionada en la pasada edición de la Nit de l’Empresa 2010, en la categoría de fomento de la calidad del empleo. Y es que a pesar de ser una empresa pequeña, cuenta con 25 trabajadores, más de la mitad de los cuales (14) son mujeres. Además, para poder ofrecer un servicio técnico de calidad a sus clientes, necesita un equipo humano con un alto grado de formación, reflejado en una plantilla de la que más del 80% dispone de titulación universitaria, entre la que promueven la formación continuada para dar estabilidad a los puestos de trabajo y un horario adecuado para conciliar la vida familiar y laboral, entre otros aspectos.