Una comida de hermandad cierra la celebración del aniversario de la Peña Azulgrana Ramon Llorens
Los actos celebrados el domingo fueron multitudinarios.
La fiesta del Barça fue muy participativa. La celebración del medio siglo de vida de la Peña Azulgrana Ramon Llorens hizo que las calles del centro de Rubí se llenaran de público para participar en las actividades programadas, pero también para acercarse a los invitados, principalmente, el presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell. La jornada festiva se cerró con una comida de hermandad a la que pudieron asistir los socios de la entidad y sus simpatizantes.
Si la celebración del 50º aniversario de la peña azulgrana fue un éxito fue gracias al trabajo de los organizadores, que contaron con la colaboración del Ayuntamiento de Rubí, pero también por la implicación de otras entidades de la ciudad. Nadie se quiso quedar al margen de esta celebración y en el pasacalles que recorrió las calles del centro y en las actuaciones que se hicieron en la plaza Catalunya estuvieron presentes desde los castellers, hasta los diablos, pasando por los trabucaires y los gigantes acompañados del grallers, la Coral Rubinenca, el Esbart Dansaire o la Escuela de Sardanas Flor de Neu.
La presencia del presidente del Barça, Sandro Rosell, fue un atractivo excepcional. El máximo responsable del club azulgrana estuvo presente en un encuentro con niños en las instalaciones deportivas de Can Roses, antes de ir a la inauguración de la nueva sede de la Peña Azulgrana Ramon Llorens, ubicada en la plaza Montserrat Roig s/n. En este acto estuvo presente la alcaldesa de Rubí, Carme García, que junto con Rosell y el presidente de la entidad, Ton Vázquez, cortó el pastel de cumpleaños.
El jueves, García ya asistió también al acto más emotivo de la celebración, el homenaje a las víctimas del accidente de tráfico que ocurrió en el año 1984, cuando los socios de la entidad viajaban a Madrid para asistir a la final de la Copa del Rey. Toda la celebración, también la del domingo, fue festiva pero con lugar para el recuerdo de los socios y presidentes de la entidad que han fallecido, algunos muy recientemente.
Si la celebración del 50º aniversario de la peña azulgrana fue un éxito fue gracias al trabajo de los organizadores, que contaron con la colaboración del Ayuntamiento de Rubí, pero también por la implicación de otras entidades de la ciudad. Nadie se quiso quedar al margen de esta celebración y en el pasacalles que recorrió las calles del centro y en las actuaciones que se hicieron en la plaza Catalunya estuvieron presentes desde los castellers, hasta los diablos, pasando por los trabucaires y los gigantes acompañados del grallers, la Coral Rubinenca, el Esbart Dansaire o la Escuela de Sardanas Flor de Neu.
La presencia del presidente del Barça, Sandro Rosell, fue un atractivo excepcional. El máximo responsable del club azulgrana estuvo presente en un encuentro con niños en las instalaciones deportivas de Can Roses, antes de ir a la inauguración de la nueva sede de la Peña Azulgrana Ramon Llorens, ubicada en la plaza Montserrat Roig s/n. En este acto estuvo presente la alcaldesa de Rubí, Carme García, que junto con Rosell y el presidente de la entidad, Ton Vázquez, cortó el pastel de cumpleaños.
El jueves, García ya asistió también al acto más emotivo de la celebración, el homenaje a las víctimas del accidente de tráfico que ocurrió en el año 1984, cuando los socios de la entidad viajaban a Madrid para asistir a la final de la Copa del Rey. Toda la celebración, también la del domingo, fue festiva pero con lugar para el recuerdo de los socios y presidentes de la entidad que han fallecido, algunos muy recientemente.