Unas 1.800 personas se califican y profesionalizan gracias a los diferentes cursos impartidos por el IMPES
El año pasado, el Instituto Municipal de Promoción Económica y Social ofreció más de un centenar de acciones formativas. Este 2013 tiene programadas 127.
El Instituto Municipal de Promoción Económica y Social (IMPES) del Ayuntamiento de Rubí impartió el año pasado un total de 111 acciones formativas, entre las que había dos certificados de profesionalidad (montaje y mantenimiento de instalaciones solares fotovoltaicas y montaje y mantenimiento de instalaciones solares térmicas). Durante el año 2012, 1.834 personas llevaron a cabo un total de 16.373 horas lectivas. El consistorio rubinense recibió una subvención de 1.141.000 euros de la Generalitat para realizar los diferentes cursos.
El concejal de Planificación Estratégica, Promoción Económica y Gobierno, Jaume Buscallà, ha hecho una 'muy buena valoración' de estas acciones formativas y ha recordado que 'el eje sobre el que giran todas las políticas económicas del Ayuntamiento de Rubí es la generación de empleo. Es donde centramos buena parte de nuestros esfuerzos'. Buscallà ha explicado que una de las claves para crear nuevos puestos de trabajo pasa porque 'desde la administración local seamos capaces de intervenir en el proceso formativo de las personas, para que el nivel de formación de los trabajadores sea más elevado y, así, logren insertarse en el mercado laboral'.
Jaume Buscallà ha destacado especialmente la inserción conseguida en los cursos del programa SEFED (Simulación de Empresas con Finalidades Educativas), que ha rondado el 55% de inserción, y en los programas de inmigración y mercado de trabajo (la inserción ha sido del 42%, aunque cabe destacar el curso de celador sanitario, que ha tenido una inserción del 54%).
El concejal también ha puesto en valor el hecho de que un 66% de los participantes en los cursos del programa de cualificación inicial PQPI dirigidos a jóvenes de entre 16 y 21 años que no disponen del graduado en ESO han vuelto a la formación reglada una vez finalizada esta acción formativa. 'Es importante que estos jóvenes, que habían quedado fuera de la formación propia de su edad, puedan volver a engancharse a la formación reglada', ha asegurado Buscallà.
El concejal de Planificación Estratégica, Promoción Económica y Gobierno también se ha referido a los cursos subvencionados directamente por el Ayuntamiento de Rubí en el marco del paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2012. Entre otros, se han impartido cursos de manipulación de equipos frigoríficos, de eficiencia energética, de inglés administrativo comercial y de mecánico de mantenimiento. Estas acciones han permitido la inserción del 31% de los participantes. Paralelamente, también se han llevado a cabo cursos de castellano y catalán, que perseguían ofrecer a los participantes los conocimientos necesarios para seguir la actividad formativa.
A nivel de demanda, los más solicitados han sido los de inglés, soldadura y electricidad (promovidos por el Servicio de Ocupación de Cataluña) y el de mecánica (incluido en el paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2012). Concretamente, los cursos promovidos por el SOC, que tienen como finalidad ofrecer a trabajadores, prioritariamente desempleados, una formación ajustada a las necesidades del mercado laboral y favorecer así la productividad y la competitividad de las empresas, así como la calificación y la promoción de los trabajadores del ámbito catalán, han contado con una asistencia de 480 personas. Los cursos del programa SEFED, un proyecto de formación profesional ocupacional que tiene como finalidad capacitar a las personas en el campo de la administración y la gestión empresarial, mediante la metodología de la simulación de empresas, han sido seguidos por 960 personas. Y las acciones formativas incluidas en el paquete de medidas extraordinarias han contado con 137 alumnos.
Como ha explicado Buscallà, toda esta subvención de más de un millón de euros ha supuesto la posibilidad de que muchos ciudadanos de Rubí 'se hayan podido calificar y profesionalizar' y eso les debe permitir mejorar su empleabilidad y/o poder acceder a un puesto de trabajo. El concejal también se ha felicitado por el hecho de que el IMPES sea el 'punto de referencia de todos aquellos trabajadores que ahora están desempleados y que quieren formarse para poder volver al mercado laboral'.
127 cursos durante el año 2013
Este año, el Ayuntamiento de Rubí ha recibido una subvención de cerca de 600.000 euros para realizar un total de 127 acciones formativas. Este año, y como consecuencia de la crisis, el consistorio ya preveía una disminución de la subvención recibida de la Generalidad de Cataluña. De hecho, el presupuesto indicado en la orden que regula la formación ocupacional suponía la mitad respecto a años anteriores. Atendiendo a estas circunstancias, el Ayuntamiento pidió la subvención en función de este presupuesto, solicitando menos acciones que otros años. 'Estamos muy satisfechos del dinero que hemos recibido para poder llevar a cabo estos cursos. De hecho, con prácticamente la mitad de la subvención del año pasado hemos programado más cursos. Sólo nos ha quedado una única acción formativa en el tintero del total que solicitamos'. Buscallà ha explicado que este año habrá continuidad en las acciones formativas financiadas por el Ayuntamiento, gracias al nuevo paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2013.
Cabe destacar que este 2013 se impartirán 5 certificados de profesionalidad más que el año anterior, además de los dos que ya se llevaron a cabo en 2012. Esto ha sido posible porque el Ayuntamiento ha adaptado los espacios donde se impartirán las sesiones a los requerimientos que vienen regulados en el BOE (metros cuadrados, material, instalaciones, etc.). Así, a los certificados de montaje y mantenimiento de instalaciones solares fotovoltaicas y montaje y mantenimiento de instalaciones solares térmicas se le suman los de trabajo doméstico, atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales, el de eficiencia energética de edificios, el de desarrollo de proyectos de instalaciones eléctricas en el entorno de edificios y con fines especiales y el de inglés comercial.
El certificado de profesionalidad es un documento oficial que acredita a quien lo obtiene que es competente profesionalmente para desarrollar una actividad laboral acorde con las exigencias de la producción y el empleo. Es decir, que tiene los conocimientos y habilidades para desarrollarla, de forma correcta y de acuerdo con las exigencias del mercado. Un certificado de profesionalidad acredita las competencias profesionales de una persona, independientemente de si éstas se han obtenido a través de la experiencia profesional o de la formación, tanto formal como no formal.
El concejal de Planificación Estratégica, Promoción Económica y Gobierno, Jaume Buscallà, ha hecho una 'muy buena valoración' de estas acciones formativas y ha recordado que 'el eje sobre el que giran todas las políticas económicas del Ayuntamiento de Rubí es la generación de empleo. Es donde centramos buena parte de nuestros esfuerzos'. Buscallà ha explicado que una de las claves para crear nuevos puestos de trabajo pasa porque 'desde la administración local seamos capaces de intervenir en el proceso formativo de las personas, para que el nivel de formación de los trabajadores sea más elevado y, así, logren insertarse en el mercado laboral'.
Jaume Buscallà ha destacado especialmente la inserción conseguida en los cursos del programa SEFED (Simulación de Empresas con Finalidades Educativas), que ha rondado el 55% de inserción, y en los programas de inmigración y mercado de trabajo (la inserción ha sido del 42%, aunque cabe destacar el curso de celador sanitario, que ha tenido una inserción del 54%).
El concejal también ha puesto en valor el hecho de que un 66% de los participantes en los cursos del programa de cualificación inicial PQPI dirigidos a jóvenes de entre 16 y 21 años que no disponen del graduado en ESO han vuelto a la formación reglada una vez finalizada esta acción formativa. 'Es importante que estos jóvenes, que habían quedado fuera de la formación propia de su edad, puedan volver a engancharse a la formación reglada', ha asegurado Buscallà.
El concejal de Planificación Estratégica, Promoción Económica y Gobierno también se ha referido a los cursos subvencionados directamente por el Ayuntamiento de Rubí en el marco del paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2012. Entre otros, se han impartido cursos de manipulación de equipos frigoríficos, de eficiencia energética, de inglés administrativo comercial y de mecánico de mantenimiento. Estas acciones han permitido la inserción del 31% de los participantes. Paralelamente, también se han llevado a cabo cursos de castellano y catalán, que perseguían ofrecer a los participantes los conocimientos necesarios para seguir la actividad formativa.
A nivel de demanda, los más solicitados han sido los de inglés, soldadura y electricidad (promovidos por el Servicio de Ocupación de Cataluña) y el de mecánica (incluido en el paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2012). Concretamente, los cursos promovidos por el SOC, que tienen como finalidad ofrecer a trabajadores, prioritariamente desempleados, una formación ajustada a las necesidades del mercado laboral y favorecer así la productividad y la competitividad de las empresas, así como la calificación y la promoción de los trabajadores del ámbito catalán, han contado con una asistencia de 480 personas. Los cursos del programa SEFED, un proyecto de formación profesional ocupacional que tiene como finalidad capacitar a las personas en el campo de la administración y la gestión empresarial, mediante la metodología de la simulación de empresas, han sido seguidos por 960 personas. Y las acciones formativas incluidas en el paquete de medidas extraordinarias han contado con 137 alumnos.
Como ha explicado Buscallà, toda esta subvención de más de un millón de euros ha supuesto la posibilidad de que muchos ciudadanos de Rubí 'se hayan podido calificar y profesionalizar' y eso les debe permitir mejorar su empleabilidad y/o poder acceder a un puesto de trabajo. El concejal también se ha felicitado por el hecho de que el IMPES sea el 'punto de referencia de todos aquellos trabajadores que ahora están desempleados y que quieren formarse para poder volver al mercado laboral'.
127 cursos durante el año 2013
Este año, el Ayuntamiento de Rubí ha recibido una subvención de cerca de 600.000 euros para realizar un total de 127 acciones formativas. Este año, y como consecuencia de la crisis, el consistorio ya preveía una disminución de la subvención recibida de la Generalidad de Cataluña. De hecho, el presupuesto indicado en la orden que regula la formación ocupacional suponía la mitad respecto a años anteriores. Atendiendo a estas circunstancias, el Ayuntamiento pidió la subvención en función de este presupuesto, solicitando menos acciones que otros años. 'Estamos muy satisfechos del dinero que hemos recibido para poder llevar a cabo estos cursos. De hecho, con prácticamente la mitad de la subvención del año pasado hemos programado más cursos. Sólo nos ha quedado una única acción formativa en el tintero del total que solicitamos'. Buscallà ha explicado que este año habrá continuidad en las acciones formativas financiadas por el Ayuntamiento, gracias al nuevo paquete de medidas extraordinarias de lucha contra la crisis 2013.
Cabe destacar que este 2013 se impartirán 5 certificados de profesionalidad más que el año anterior, además de los dos que ya se llevaron a cabo en 2012. Esto ha sido posible porque el Ayuntamiento ha adaptado los espacios donde se impartirán las sesiones a los requerimientos que vienen regulados en el BOE (metros cuadrados, material, instalaciones, etc.). Así, a los certificados de montaje y mantenimiento de instalaciones solares fotovoltaicas y montaje y mantenimiento de instalaciones solares térmicas se le suman los de trabajo doméstico, atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales, el de eficiencia energética de edificios, el de desarrollo de proyectos de instalaciones eléctricas en el entorno de edificios y con fines especiales y el de inglés comercial.
El certificado de profesionalidad es un documento oficial que acredita a quien lo obtiene que es competente profesionalmente para desarrollar una actividad laboral acorde con las exigencias de la producción y el empleo. Es decir, que tiene los conocimientos y habilidades para desarrollarla, de forma correcta y de acuerdo con las exigencias del mercado. Un certificado de profesionalidad acredita las competencias profesionales de una persona, independientemente de si éstas se han obtenido a través de la experiencia profesional o de la formación, tanto formal como no formal.