Ruta de las masías
Hasta el siglo XX, nuestra villa contaba con un número importante de masías repartidas por todo el término municipal. La mayoría han ido desapareciendo con el crecimiento de la ciudad, pero todavía encontramos algunas que nos recuerdan nuestro pasado agrícola.
Can Serrafossà
Antiguo Mas de la Rovira, su denominación corresponde a la unión, a finales del siglo XVI, de las familias Serra i Fossà. A finales del siglo XIX, la familia Borrell, descendiente directo, se hizo cargo de lo heredado, y en 1972 fue vendida a una familia del Papiol. Es la masía con más tierras en activo y lo que ejemplifica mejor la diversidad de cultivos de la historia reciente de Rubí. De la masía destacan el portal y la ventana del 1601.
Can Xercavins
Una de las masías más antiguas y con más historia de nuestro término, ya que la primera noticia que tenemos es del 1152. El origen toponímico parece provenir del arroyo cercano a la casa, nombrado Exercavins en algunos pergaminos antiguos. El árbol genealógico de la familia va desde 1152 hasta nuestros días. En el año 1396, Joan I nombró a Pere de Xercavins el primer Alcalde Real de Rubí.
Can Feliu
Se tiene constancia desde el siglo XIII, cuando recibía el nombre de Mas Llunell. En 1810 pasó a formar parte de las propiedades de Ca n'Oriol y en 1949 pasó a manos de Can Xercavins. Continuó funcionando como una explotación agrícola con diversidad de labradores hasta que la crisis agraria la convirtió en el restaurante que encontramos actualmente.
Can Ramoneda
El 1187 se conocía como Mas Clapera. El nombre actual lo recibe a partir del siglo XV y desde entonces se han sucedido dieciocho generaciones. Tanto es así que la familia conserva un árbol genealógico que va desde el año 1500 hasta nuestros días. En la Exposició Internacional de Barcelona de 1888, Marià Ramoneda y Llunell obtuvo una medalla de oro por los vinos obtenidos de los viñedos. Actualmente está abierto como espacio para la celebración de eventos.
Can Serra
Se ha conocido por otros nombres, como por ejemplo Serra del Molí o Serrallach, y ya se menciona en documentos del año 1230. En los años 40 (s. XX) la adquirió el industrial rubinense Josep Abril, que restauró la masía con mucho cuidado, sin cambiar el aspecto exterior. Inició su degradación después de la riada de 1962. En los años 90 fue reformada mediante la Escola Taller.
Ca n'Oriol
Era conocida como Cases Besses hasta el siglo XIV, momento en que aparecieron los Oriols como propietarios. En 1949 murió la última descendiente y se dieron las propiedades a la obra benéfica de la Visitació de Nostra Senyora, que acogió niños hasta 1997. Actualmente, se utiliza como casa de colonias. Justo delante de la masía se conserva la era, construida en 1848.
Can n'Alzamora
Los primeros datos que tenemos son del año 1299, cuando se conocía por Mas Mestro. Ha tenido varios nombres en función de los propietarios, pero desde el siglo XVIII ha sido regentada por la familia Alzamora. Pertenece a la parroquia y municipio de Rubí desde 1885. La fachada conserva ventanas góticas del siglo XVII, y la central, sobre el portal, luce un blasón de un antepasado propietario de la masía.
Torre de la Llebre
Todo hace pensar que la primitiva masía respondía a una casa fortificada para la prevención de los ataques de los sarracenos procedentes del otro lado del río Llobregat. Hasta mediados del siglo XVII se conoció como Mas Pla o Mas Caldes, y cambió el nombre cuando fue adquirida por Joan Llebra, mercader de Barcelona, cuando pertenecía aún al monasterio de Sant Cugat. Fue anexionada al cabo y la parroquia de Rubí en el siglo XIX. Actualmente es un restaurante.