Barrios

Estos son los barrios que forman la ciudad:

• Can Fatjó
• Sant Jordi Park
• Can Serrafossà – La Perla
• Can Ximelis
• Els Avets
• Castellnou – Can Mir
• Can Solà
• Can Barceló - Vallespark
• Sant Muç
• Ca n’Alzamora
• Can Vallhonrat
• 25 de Setembre
• Les Torres
• Centre
• Plana del Castell
• Ca n’Oriol
• Zona Nord - La Serreta
• Can Rosés
• Progrés - Rubí 2000
• Mercat
• Plana de Can Bertran
• Sector Z
• El Pinar

En los años 50, en Rubí comenzaron a aparecer los primeros bloques de pisos, situados no en la periferia, sino en el mismo casco urbano. En el mismo 1950, el constructor Saumell edificó los pisos de la calle Sant Cugat, que aún se conservan, a los que siguieron los de Fillol, en el camino de Ca n'Oriol; los de Can Sedó, los de Pich Aguilera (Can Claverí), y finalmente, ya entrados en los años 60, se edificaron los pisos de los barrios del Pinar y los del Vint-i-cinc de Setembre.

Es también a partir de los años 50 que empezaron a aparecer casas de autoconstrucción aisladas en puntos como la actual Serreta, Ca n'Oriol o Can Fatjó, además de las que también surgieron en el preexistente barrio del Escardívol, desaparecido por la riada.

Fue en esa década cuando comenzó la inmigración masiva en el municipio de personas procedentes de otros lugares del estado. Esto dio pie a la construcción de estas viviendas que, en un principio, no estaban dotadas de las infraestructuras más básicas (cuando empezaron a edificarse en las afueras) y, además fueron un auténtico negocio para las inmobiliarias locales. Antes de la riada, todas las tierras que ahora ocupan los barrios periféricos eran grandes extensiones cultivadas de viña, por lo que siempre se ha dicho que aquella catástrofe marcó un punto de inflexión en el desarrollo urbanístico de la ciudad.

A principios de los años 60 también apareció el barrio de Can Vallhonrat, que no estaba constituido por los típicos bloques de pisos, sino por casas familiares. Además, fue de los primeros donde se instaló el alcantarillado, los aceras y el alumbrado público, entre otros.

Las primeras urbanizaciones en la parte más rural y boscosa de Rubí también surgieron en los años 60, como Castellnou. En este caso no eran bloques de apartamentos, sino pequeñas casas o "chalets".

No fue hasta finales de la década de los 60 y principios de los 70 cuando se produjo la gran eclosión de los bloques de pisos en Rubí. Se construyó, en varias etapas, el "conjunto residencial" de Les Torres de Rubí, ya proyectado desde hacía años y que conllevó el derribo de la masía de Can Cabanyes. También aparecieron los primeros bloques en la zona de la Plana de Can Bertran, que convivían con las viejas casas modernistas, así como la Serreta. Y, de este modo, la periferia de Rubí fue transformándose en una combinación de barrios de viviendas y polígonos industriales.

Es también en los años 70 cuando aparecieron las primeras asociaciones de vecinos, que tenían como objetivo básico mejorar las condiciones de vida de los habitantes de aquellas pequeñas aglomeraciones recién nacidas. A partir de los años 80, con el nuevo ayuntamiento democrático, y muy poco a poco, se fue trabajando para implantar nuevas infraestructuras a estos barrios.