Energías renovables y eficiencia energética
El avance, tanto tecnológico como normativo, ha permitido la democratización de algunas fuentes de energía renovable, como la fotovoltaica para autoconsumo, o la térmica para calentar agua sanitaria o para calefacción. Avanzamos hacia otro modelo energético, que pueda alcanzar la descarbonización de la economía, para así poder hacer frente a la situación de emergencia climática y reducir la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera. La Unión Europea ha fijado para 2030 una reducción del 40% de las emisiones, un avance de las energías renovables sobre el consumo final del 32% y también una mejora de la eficiencia energética.
Esta transición energética, encaminada a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos en la agenda 2030 de las Naciones Unidas, debe garantizar el derecho social al acceso a la energía y debe democratizarse mediante la participación ciudadana y de la pequeña y mediana empresa. Es necesario también facilitar la producción de energías renovables autóctonas cercanas a los puntos de consumo, modernizar la red y desarrollar herramientas tecnológicas para que la gestión sea más efectiva y eficiente.
Rubí Brilla
El proyecto, Rubí Brilla, empezó a desarrollarse tras la anexión de la ciudad de Rubí al Pacto de Alcaldes de 2008, un compromiso ZEO que obligó a las ciudades firmantes a aumentar en 2020 un 20% el uso de renovables y reducir un 20% nivel de emisiones.
En 2011 se inició el proyecto Rubí Brilla con el objetivo de que la ciudad de Rubí se convirtiera en un referente nacional e internacional en la eficiencia energética, el ahorro y el uso de energías renovables en entornos industriales, comerciales y domésticos.