Acciones anteriores de la campaña
Ciudadanía en general, establecimientos comerciales, escuelas e institutos... son los diferentes sectores de la población con los que se han realizado acciones adaptadas a su perfil con el objetivo común de mejorar el porcentaje de selección de los residuos desde el conocimiento de lo que implica no hacerlo.
¿Por qué esta campaña?
Según las estadísticas de 2016
- El 76% de los residuos que generábamos en nuestro hogar podrían haber sido aprovechados y transformados en recursos si los hubiéramos depositado en el contenedor que tocaba.
- El tratamiento de la fracción resto supuso 2015 un 72% del coste del tratamiento global de todos los residuos, casi 3,5 millones de euros.
- La tasa de selección de residuos en Rubí es del 28%, una de las más bajas de toda la comarca.
- Por otro lado, los abandonos de trastos viejos y otros residuos junto a los contenedores son situaciones que se repiten cada vez más en nuestras calles, haciendo que nuestra ciudad parezca sucia y gris.
Según las estadísticas de 2018
- A partir de la ejecución de la campaña Recicla, pon colores a la ciudad, la tasa de selección de residuos ha aumentado de manera progresiva hasta alcanzar el 37% el 2018.
- Aproximadamente 2 de cada 10 kg de los residuos que se tiraron al contenedor marrón, no eran restos orgánicos, sino residuos impropios.
- La evolución de los residuos impropios alcanza su máximo histórico con un 21,3% de residuos que se tiran al contenedor equivocado. Su gestión supuso un sobre-coste de casi 75.000 € en la ciudad.
Infografía ¡Recicla!, 2018
¿Como se ha desarrollado?
Ciudadanía
Escuelas e institutos
- 1.984 niños de Educación Infantil han hecho un primer contacto con la selección de los diferentes tipos de residuos participante de la obra de teatro El laboratorio de inventos.
- A través del escape room Retorno a la Tierra, 4.058 alumnos de Educación Primaria y 1.830 de Secundaria han visto qué pasará en nuestro planeta si no desarrollamos una conciencia medioambiental y han encontrado soluciones para revertir los pronósticos de la situación futura.
En total, han participado de la campaña Recicla en los centros educativos casi 8.000 alumnos, a los que se les ha repartido:
- 4.058 fiambreras en las escuelas, para promover los desayunos sostenibles.
- 1.830 lotes de reciclaje (cubo de orgánica con un paquete de bolsas compostables y bolsas de rafia para separar el vidrio, los envases y el papel y cartón) en los institutos, para promover que los jóvenes puedan organizar la recogida selectiva a sus hogares.
Paralelamente, y para dar continuidad a la campaña, se han instalado 32 nuevos puntos de recogida selectiva en los patios y se han ambientalizado 181 aulas de 18 centros educativos.
Establecimientos e instalaciones municipales
Con el apoyo del Consorci de Residus del Vallès Occidental, y después de realizar visitas informativas sobre la selección de residuos, se ha iniciado el sistema de recogida puerta a puerta de residuos a los grandes generadores de los polígonos de la ciudad (establecimientos e instalaciones que, por su actividad o por el volumen de personas que acogen, generan un volumen de residuos importante).
Hasta el 2018 han participado un total de 6 instalaciones y 33 establecimientos de restauración, a los que se ha dotado de contenedores para la recogida selectiva de sus residuos.
¡Recicla! Al marrón, solo orgánica
Después de los datos referentes a impropios del año 2018, la campaña entra en una segunda fase dedicada a mejorar la problemática de los residuos impropios de cada fracción, empezando por la orgánica.
¿Qué son los residuos impropios y por qué son un problema?
Son los que tiramos a un contenedor que no corresponde. Por ejemplo: si tiramos restos de carne envasada en plástico en el contenedor de orgánica, la bandeja, se convierte en un residuo impropio que dificulta la transformación de los restos orgánicos en compost aprovechable y añade un sobrecoste en la gestión de la fracción orgánica.
Costes ambientales
Encontrar en la orgánica impropios como bolsas de plástico, frascos de vidrio o textiles, dificulta el proceso de reciclaje y los acabaremos encontrando en el compost final contaminando campos y cultivos.
Costes económicos
Cada tonelada de residuos que entra en un vertedero o incineradora se graba con un canon ambiental. Sin embargo, las poblaciones que recogen selectivamente los residuos orgánicos, se pueden beneficiar de un retorno económico procedente de este canon. Cuanto mayor sea la cantidad y calidad de los residuos orgánicos recogidos, de mayor cuantía será el retorno económico.
¿Por qué reciclar correctamente los restos orgánicos?
- Para reducir el impacto ambiental que generan (lixiviados, emisión de gases de efecto invernadero ...) y darles un nuevo uso, transformándolos en electricidad y compost de calidad para abonar los campos.
- Para obtener un mayor retorno económico a la vez que ahorramos también por cada tonelada de orgánica que no entra en el vertedero. Este retorno se destina a cubrir los gastos y/o llevar a cabo actuaciones de fomento y mejora de la gestión de la recogida selectiva de los restos orgánicos.
Algunos consejos para reducir residuos impropios en el cubo de orgánica
- Si se te ha estropeado un alimento envasado, recuerda que el envase, ya sea de plástico o de aluminio, va al contenedor amarillo.
- Siempre que puedas, utiliza bolsa compostable y cubos aireados para depositar tus residuos orgánicos.
- Tienes dudas sobre qué contenedor tirar un residuo?
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